Es innegable el impacto que la conectividad digital está teniendo en los consumidores de todo el mundo. Y a medida que aumenta la conectividad, se amplía la gama de actividades digitales que realizamos, incluido el comercio electrónico. Cada día, 3.400 millones de consumidores se conectan a Internet y pasan, de media, seis horas y media en línea. Esta cifra representa el 85% de la población mundial conectada a Internet.

Sin embargo, a pesar de la omnipresencia de lo digital, los consumidores de todo el mundo aún no han adoptado plenamente el comercio electrónico en muchas categorías, sobre todo en el sector de los bienes de consumo de rápida rotación (FMCG). Por ello, a medida que los fabricantes y los minoristas tratan de aprovechar la oportunidad del comercio electrónico, necesitan comprender el uso, el comportamiento y los hábitos de los consumidores en línea, así como qué está impulsando la adopción del comercio electrónico. Las ventas mundiales en línea en 2017 ascendieron a 2,3 billones de dólares, lo que representa el 10,2% de las ventas minoristas totales, y esperamos que esa proporción alcance el 17,5% en 2021.

LA CONECTIVIDAD SIENTA LAS BASES DEL CRECIMIENTO DEL COMERCIO ELECTRÓNICO

El aumento de la conectividad a Internet está allanando el camino para el comercio electrónico en muchos mercados mundiales, como se detalla en el reciente informe de Nielsen sobre comercio conectado, que ofrece información sobre el consumidor global conectado, los rasgos de las compras, la evolución de las categorías y las barreras, para identificar el potencial de crecimiento futuro.

Como se detalla en el informe, moda, viajes y libros/música son las tres principales categorías que los consumidores compran en línea, con un 61%, 59% y 49%, respectivamente, en todos los mercados del mundo.

Para los consumidores en línea, la conectividad es un factor importante: Ha mejorado la capacidad de los consumidores para buscar y comparar productos y servicios; pone de relieve la disponibilidad y los precios de los productos; y fomenta el pedido y la entrega de productos en los lugares y momentos deseados. A medida que los fabricantes y los minoristas satisfacen la necesidad de comodidad y facilidad de entrega de los consumidores, éstos se muestran más dispuestos a comprar en línea otras categorías, como bienes de consumo duraderos, artículos de ocio, productos para el cuidado del hogar, bebidas alcohólicas y artículos de gran consumo, como alimentos frescos, alimentos envasados y productos para el cuidado del bebé.

La creciente disposición de los consumidores a ampliar sus comportamientos de compra en línea, en particular para incluir alimentos, pone de relieve la dinámica cambiante del panorama del comercio electrónico, así como las oportunidades para los mercados de todo el mundo en los próximos años.

Con el aumento de la conectividad y la mejora de las infraestructuras, los obstáculos a las compras en línea seguirán disminuyendo. Por ejemplo, en muchos mercados se están implantando métodos de pago seguros y monederos móviles alternativos, que ofrecen a los consumidores más confianza y opciones de pago.

Dado que la comodidad es uno de los principales facilitadores del comercio conectado, los compradores buscan experiencias sin fricciones que ahorren tiempo, reduzcan obstáculos y ofrezcan una experiencia agradable. La considerable disposición de los consumidores a probar diferentes opciones de compra, pago y entrega ha aumentado con los años. La reposición en el mismo día, la entrega gratuita para pedidos de gran valor, la capacidad de respuesta y la devolución del dinero en caso de pedidos incorrectos son algunas de las características que más animan a los consumidores a comprar productos consumibles en línea. Los minoristas que ofrezcan estas características y creen nuevas vías de pago en línea mejorarán la adopción del comercio electrónico por parte de los consumidores de bienes de consumo y otras categorías de productos en evolución.

Si desea más información, descargue el informe de Nielsen sobre comercio conectado.