Entre los muchos retos a los que se han enfrentado los profesionales del marketing durante el último año en medio de la pandemia, todavía se vislumbra en la distancia uno que alterará la industria: un mundo sin cookies de terceros. Sin cookies, los profesionales del marketing tendrán que reevaluar las fuentes y la calidad de sus datos para establecer y mantener relaciones relevantes con los consumidores. Los datos de origen de calidad serán fundamentales, pero no bastarán por sí solos. 

Y a medida que aumenten la conectividad y las interacciones digitales, seguirán apareciendo nuevas fuentes de datos en línea. Sin embargo, es importante destacar que las marcas suelen centrarse en fuentes de datos que destacan una acción al final del recorrido del cliente, como una compra o una interacción con una página web. A medida que los profesionales del marketing empiecen a pensar en todo el recorrido del consumidor en lugar de sólo en un punto final, necesitarán datos sobre lo que hacen los consumidores cuando no están interactuando directamente con la marca. Ahí es donde las asociaciones de datos de terceros y las basadas en personas pueden ayudar. Para saber más sobre el papel de las personas reales en un mundo de marketing sin cookies de terceros, hemos hablado con Furqan Hanif, vicepresidente de gestión de productos digitales, que nos ofrece más información sobre cómo las marcas pueden utilizar los datos para seguir siendo relevantes para los consumidores cuando las cookies de terceros ya no sean una opción.

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